La pandemia de COVID-19 ha marcado un antes y un después en muchos aspectos de nuestras vidas, y el mundo de los viajes no ha sido una excepción.

A medida que el mundo se reabre gradualmente y las restricciones se levantan, muchos nos preguntamos: ¿Cómo serán los viajes después de la pandemia? Ahora, con cierta perspectiva, podemos reflexionar sobre los cambios significativos en nuestra percepción y hábitos de viaje.

1. Mayor conciencia sobre la salud y la higiene #

Uno de los cambios más evidentes es la mayor preocupación por la salud y la higiene. Los viajeros ahora son más conscientes de las medidas sanitarias y es común ver a personas usando mascarillas en aeropuertos o desinfectando sus asientos en aviones. Esta nueva conciencia ha llevado a que muchos prefieran destinos percibidos como "seguros" o con buenos sistemas de salud.

• Nuevas rutinas de higiene: El uso de gel hidroalcohólico, mascarillas y toallitas desinfectantes se ha convertido en parte esencial del equipaje del viajero.
• Selección de alojamientos: Los viajeros prestan más atención a los protocolos de limpieza de hoteles y apartamentos turísticos.
• Preferencia por destinos con buena sanidad: Países con sistemas sanitarios robustos y buena gestión de la pandemia se han vuelto más atractivos.

2. Preferencia por espacios abiertos y naturaleza #

La pandemia nos hizo valorar más los espacios abiertos. Como resultado, ha habido un auge en el turismo de naturaleza y las actividades al aire libre. Destinos rurales, parques nacionales y playas menos concurridas han ganado popularidad frente a las grandes ciudades.

• Auge del turismo rural: Casas rurales y alojamientos en entornos naturales han experimentado un notable incremento en la demanda.
• Actividades al aire libre: Senderismo, ciclismo y deportes acuáticos han ganado adeptos como alternativas seguras de ocio.
• Redescubrimiento de parques naturales: Muchos viajeros optan por explorar áreas naturales protegidas en lugar de destinos urbanos masificados.

3. Viajes domésticos y de proximidad #

Las restricciones internacionales y el miedo a quedarse varado en un país extranjero han impulsado el turismo local y nacional. Muchos han redescubierto la belleza de sus propios países, fomentando un turismo más sostenible y contribuyendo a las economías locales.

• Exploración de la "España vaciada": Pueblos y regiones menos conocidas han visto un aumento de visitantes nacionales.
• Turismo de proximidad: Los viajes cortos y escapadas de fin de semana a destinos cercanos se han vuelto más populares.
• Redescubrimiento de la gastronomía local: Mayor interés en productos km 0 y experiencias culinarias auténticas de cada región.

4. Flexibilidad y planificación a corto plazo #

La incertidumbre de la pandemia nos ha enseñado a ser más flexibles. Las reservas de última hora y las políticas de cancelación flexibles se han vuelto la norma. Los viajeros ahora valoran más la capacidad de cambiar sus planes sin penalizaciones.

• Auge de las reservas de última hora: Los viajeros esperan hasta el último momento para hacer sus reservas, buscando ofertas y asegurándose de que no haya restricciones.
• Políticas de cancelación flexibles: Hoteles y aerolíneas han adaptado sus políticas para ofrecer mayor flexibilidad en cambios y cancelaciones.
• Seguros de viaje más completos: Ha aumentado la demanda de seguros que cubren cancelaciones por COVID-19 y otras eventualidades.

5. Trabajo remoto y "workcations" #

El auge del trabajo remoto ha difuminado las líneas entre trabajo y vacaciones. Muchos aprovechan esta flexibilidad para hacer "workcations", combinando trabajo y ocio en destinos atractivos por períodos más largos.

• Estancias más largas: Los viajeros tienden a quedarse más tiempo en un destino, combinando trabajo y ocio.
• Búsqueda de alojamientos con buen Wi-Fi: La conectividad se ha vuelto un factor crucial en la elección del alojamiento.
• Auge de las "nómadas digitales": Más personas eligen vivir y trabajar desde diferentes lugares, impulsando nuevos tipos de visados y servicios.

6. Mayor uso de la tecnología #

La tecnología juega un papel aún más crucial en nuestros viajes. Desde check-ins sin contacto hasta menús digitales en restaurantes, la adopción de soluciones tecnológicas se ha acelerado enormemente.

• Check-in y facturación sin contacto: Uso generalizado de apps y quioscos de autoservicio en aeropuertos y hoteles.
• Pagos contactless: Aumento del uso de tarjetas y móviles para pagos sin efectivo.
• Realidad virtual y aumentada: Algunas atracciones turísticas ofrecen experiencias virtuales como complemento o alternativa a la visita física.

7. Búsqueda de experiencias auténticas y significativas #

Después de meses de confinamiento, muchos viajeros buscan experiencias más profundas y significativas. Hay un renovado interés en el turismo cultural, las experiencias locales auténticas y los viajes transformadores.

• Turismo experiencial: Mayor demanda de actividades que permitan sumergirse en la cultura local.
• Aprendizaje en viajes: Aumento de viajes centrados en aprender nuevas habilidades o idiomas.
• Viajes de voluntariado: Creciente interés en combinar vacaciones con actividades de voluntariado o apoyo a comunidades locales.

8. Conciencia sobre el impacto del turismo #

La pausa forzada en el turismo global nos hizo reflexionar sobre su impacto en el medio ambiente y las comunidades locales. Hay una creciente demanda de opciones de viaje más sostenibles y éticas.

• Ecoturismo: Mayor interés en alojamientos y actividades que minimicen el impacto ambiental.
• Turismo de bajo impacto: Preferencia por destinos menos masificados y formas de viajar más sostenibles.
• Apoyo a economías locales: Los viajeros buscan formas de asegurar que su gasto beneficie directamente a las comunidades locales.

Conclusión #

La pandemia ha actuado como un catalizador, acelerando tendencias que ya estaban en marcha y creando otras nuevas. Si bien algunos cambios pueden ser temporales, otros probablemente definirán la nueva normalidad en el mundo de los viajes.

Como viajeros, tenemos la oportunidad de reflexionar sobre nuestros hábitos y prioridades. ¿Queremos volver a los patrones pre-pandemia o aprovechar esta oportunidad para reinventar la forma en que viajamos, haciéndola más consciente, sostenible y significativa?

El futuro de los viajes está en nuestras manos. ¿Cómo elegiremos viajar en esta nueva era?