El tanque de tormentas de Etxebarri es una impresionante infraestructura hidráulica situada en el área metropolitana de Bilbao, concretamente en la península de Legizamón, frente al río Nervión. Este gigantesco depósito subterráneo, inaugurado en noviembre de 2014, representa una de las obras más ambiciosas del Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia en los últimos años y se ha convertido en un elemento crucial para la gestión sostenible del agua en la región.
Arquitectura e historia #
El tanque de tormentas de Etxebarri es una obra de ingeniería de proporciones colosales que desafía la imaginación. Con unas dimensiones en planta similares a las de un campo de fútbol (145 x 65 metros) y una profundidad equivalente a un edificio de cinco plantas, este depósito subterráneo tiene una capacidad de almacenamiento de 74.480 metros cúbicos, lo que equivale a unos 75 millones de litros de agua o 30 piscinas olímpicas.
La construcción de esta infraestructura comenzó en 2010 y requirió una inversión de más de 33 millones de euros. El proyecto, que duró poco más de 4 años, implicó un movimiento de tierras de aproximadamente 400.000 m³, incluyendo 214.000 m³ de excavación en suelos y 178.000 m³ en roca. Todo esto se realizó al abrigo de un sostenimiento pesado en base a 4.300 m² de muros pantalla de 1,00 m de espesor, empotrados 1,00 m en roca sana y asegurados mediante anclajes de cables a la roca subyacente, con una longitud aproximada de 11.000 m de anclajes.
La estructura se compone de más de 45.000 m³ de hormigón estructural y 5.000 toneladas de acero en redondos. Además, se utilizaron 13.800 m² de forjado autoportante de 3 T/m² y 3.675 m² de forjado autoportante de 1 T/m². Para el anclaje de la solera, se emplearon 3.650 m de micropilotes de 180 mm.
El tanque está dividido en cuatro cuerpos o depósitos diferenciados, cuyo llenado se realiza de modo secuencial desde el propio túnel del Interceptor Nervión-Ibaizabal. El vaciado se efectúa por gravedad al mismo Interceptor. Esta configuración permite una gestión eficiente del agua almacenada y facilita las tareas de mantenimiento y limpieza.
Función y beneficios medioambientales #
La función principal del tanque de tormentas es evitar que las aguas residuales acaben en el entorno natural durante episodios de fuertes lluvias. Cuando se producen precipitaciones intensas, la depuradora de Galindo, situada en Sestao, puede saturarse, lo que provocaría que tanto las aguas residuales como las pluviales acabaran en los ríos o en el mar sin el tratamiento adecuado. El tanque de Etxebarri recoge este exceso de agua, almacenándola temporalmente hasta que pueda ser procesada correctamente en la depuradora.
Se estima que el tanque entrará en funcionamiento unas 14 veces al año, evitando el vertido de 1.200 millones de litros de agua sucia al río Nervión anualmente. Esto supone una mejora significativa en la calidad del agua del río y su entorno, contribuyendo a la recuperación medioambiental de la zona.
El tanque de Etxebarri forma parte del Plan Integral de Saneamiento del Bilbao metropolitano, el proyecto medioambiental más importante llevado a cabo en la Comunidad Autónoma Vasca. Este plan no solo cumple con las exigencias de la Unión Europea en materia de tratamiento de aguas residuales, sino que ha permitido la recuperación medioambiental de ríos, ría y playas en toda la región.
Sistema de funcionamiento y tecnología #
El funcionamiento del tanque de tormentas de Etxebarri es un ejemplo de ingeniería avanzada:
- Sistema de llenado y vaciado: El llenado del tanque se realiza por gravedad desde el Interceptor Nervión-Ibaizabal. Cuando el nivel de agua en el interceptor supera cierto umbral, el exceso se desvía automáticamente al tanque. Una vez que cesa la lluvia y los niveles en el interceptor bajan, el agua almacenada en el tanque se devuelve gradualmente al sistema para su tratamiento en la depuradora de Galindo.
- Sistema de limpieza: Después de cada episodio de llenado, es necesario limpiar el tanque. Para ello, se dispone de un sofisticado sistema que utiliza 8 bombas de vacío con capacidad de 50 m³ cada una. El tanque está dispuesto en 8 calles de 7 m de ancho y una longitud máxima de 135 m. La limpieza de cada calle se consigue mediante la descarga súbita del agua retenida en depósitos de 50 m³, lo que, unido a la pendiente de la solera del tanque, ocasiona la movilización del sedimento depositado.
- Ventilación y desodorización: La ventilación de la zona húmeda se realiza mediante un sistema que introduce 103.000 m³/h de aire fresco y extrae 108.400 m³/h de aire. El aire extraído se trata en equipos de filtrado con carbón activo para su desodorización, minimizando así el impacto olfativo en la zona.
- Control y automatización: Para el control y supervisión de la totalidad de la instalación, se dispone de un autómata programable en el cuadro general de Baja Tensión. Este autómata se comunica con el puesto de Control central de la EDAR de Galindo, permitiendo una gestión integrada y eficiente de todo el sistema de saneamiento.
El edificio de control #
Junto al tanque subterráneo, se ha construido un edificio de control que merece mención aparte. Este edificio ocupa una superficie en planta de 650 m², distribuidos en cuatro plantas, con una superficie total de 2.330 m². Su estructura se basa en pilares de hormigón y cubierta y losas intermedias a base de forjados reticulares.
El edificio alberga los sistemas de control y monitorización del tanque, así como las instalaciones eléctricas necesarias para su funcionamiento. Cuenta con un centro de seccionamiento y un centro de transformación, con un transformador de potencia en seco de 640 KVA, garantizando el suministro eléctrico necesario para todas las operaciones del tanque.
Impacto en la comunidad y el medio ambiente #
El tanque de tormentas de Etxebarri no solo beneficia al medio ambiente, sino que también tiene un impacto positivo en la comunidad local:
- Mejora de la calidad del agua: Al evitar el vertido de aguas sin tratar al río Nervión, el tanque contribuye significativamente a la mejora de la calidad del agua en toda la cuenca.
- Prevención de inundaciones: El tanque ayuda a prevenir inundaciones en áreas urbanas durante episodios de lluvias intensas, protegiendo así propiedades y infraestructuras.
- Recuperación de espacios naturales: La mejora en la calidad del agua ha permitido la recuperación de espacios naturales en las riberas del Nervión, creando nuevas áreas de esparcimiento para los ciudadanos.
- Cumplimiento de normativas ambientales: El tanque ayuda a la región a cumplir con las estrictas normativas de la Unión Europea en materia de tratamiento de aguas residuales.
Curiosidades y datos de interés #
- El tanque de Etxebarri es el más grande de Euskadi, superando en capacidad a otros tanques de tormentas de la región como los de Santurtzi (12 millones de litros), Lamiako (10 millones) y Asua (8 millones).
- La capacidad del tanque representa aproximadamente un tercio del consumo diario de agua en el Gran Bilbao, que se estima en unos 200 millones de litros.
- Como curiosidad histórica, las dimensiones y capacidad de este tanque son casi idénticas a las de la famosa Cisterna de Estambul, construida hace 15 siglos. En conmemoración de este hecho, se ha colocado en el tanque de Etxebarri una reproducción de una cabeza de medusa, similar a las que se pueden encontrar en la cisterna turca, junto con una placa conmemorativa.
- El tanque recoge aguas de una amplia zona que incluye Galdakao, Usansolo, Basauri, Bedia y Etxebarri.
- Aunque el tanque está diseñado para funcionar unas 14 veces al año de media, su uso puede variar significativamente dependiendo de los patrones de lluvia anuales.
Conclusión #
El tanque de tormentas de Etxebarri es mucho más que una simple infraestructura de saneamiento. Representa un hito en la ingeniería hidráulica y un símbolo del compromiso de Bilbao y el País Vasco con la sostenibilidad y la protección del medio ambiente.
Esta obra, aunque invisible para la mayoría de los ciudadanos, juega un papel crucial en la mejora de la calidad de vida de la región. Protege los recursos hídricos, previene inundaciones, mejora la calidad del agua de los ríos y contribuye a la recuperación de espacios naturales.
El tanque de tormentas de Etxebarri es un testimonio del ingenio humano y un ejemplo de cómo la tecnología y la ingeniería pueden trabajar en armonía con la naturaleza para crear un futuro más sostenible. Es, sin duda, un motivo de orgullo para Bilbao y un modelo a seguir para otras ciudades que buscan soluciones innovadoras a los desafíos del cambio climático y la gestión del agua urbana.
Juanjo Marcos
Desarrollador y diseñador web actualmente afincado en Bilbao. Desde que tengo uso de razón viajar es una de mis grandes pasiones, junto a la tecnología, la fotografía y los largos paseos sin rumbo definido.
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